Las familias que viven en Nuevo Almaguer, en Guadalupe, han sufrido las consecuencias de los malos olores causados por el desbordamiento de aguas residuales. Desde hace dos años, los residentes de esta área han enfrentado el problema del mal olor debido al acumulamiento de aguas negras en las alcantarillas.
A pesar de los reportes presentados por vecinos como Juan Morales a las autoridades municipales, estas no han solucionado el problema.
«Me comentan algunas personas que viene por parte del municipio que es a través de tapones, pero no son tapones porque es acumulamiento…. Y a nosotros nos perjudica lo que es el líquido que sale de las alcantarillas”, señaló uno de los vecinos.
Además, han tenido que trasladar sus muebles al patio para poder comer y dormir, ya que las aguas residuales han penetrado por las paredes de su hogar, convirtiendo el interior en un espacio inhabitable para los residentes.
Debido a la falta de atención por parte de Servicios de Agua y Drenaje, los residentes han decidido juntar una suma de mil 500 pesos para contratar a una cuadrilla de estos servicios públicos. Destacan que esta es la única manera en que el personal brinda ayuda a las familias.