
Un nuevo estudio descubrió que las personas diagnosticadas con colesterol alto pueden beneficiarse de una dieta basada en plantas, que ha demostrado reducir el colesterol «malo» (LDL) en un 10 % y el colesterol total en un 7 %. Esto equivale a un tercio del efecto de los medicamentos para reducir el colesterol, como las estatinas. La autora principal, la Dra. Ruth Frikke-Schmidt, enfatizó que se observaron resultados similares en varios estados demográficos y de salud, lo que indica que la adopción temprana de dietas vegetarianas o veganas podría disminuir sustancialmente el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Este metanálisis utilizó datos de 30 ensayos clínicos realizados entre 1982 y 2022, que examinaron los efectos de las dietas vegetarianas o veganas sobre diferentes tipos de colesterol y una proteína sanguínea llamada apolipoproteína B (apoB). Los resultados demostraron una reducción del 14 % en los niveles de apoB para personas con dietas basadas en plantas.
Si bien el estudio apoyó los beneficios de las dietas basadas en plantas para la salud del corazón, también indicó que la dieta puede tener un impacto limitado en los niveles de colesterol para aquellos genéticamente inclinados a producir colesterol en exceso. Por lo tanto, el tratamiento con estatinas sigue siendo esencial para las personas de alto riesgo.
El estudio enfatizó que la transición a una dieta basada en plantas debe estar bien planificada, asegurando una ingesta suficiente de nutrientes como hierro, yodo, vitamina B12 y vitamina D. Además, no todas las dietas basadas en plantas son iguales; las que contienen frutas, verduras y cereales integrales son beneficiosas, mientras que las dietas ricas en carbohidratos refinados, grasas, azúcares y sales no lo son. Para aquellos que luchan con una dieta totalmente vegetariana o vegana, la dieta mediterránea es una alternativa viable.