
El mensaje estuvo acompañado por una serie de imágenes que capturan diferentes momentos junto a Gómez Bolaños
A casi una década de la partida de Roberto Gómez Bolaños, Florinda Meza vuelve a conmover a sus seguidores con un mensaje cargado de nostalgia, amor y memoria.
La actriz, inmortalizada por su personaje de Doña Florinda en El Chavo del 8, reapareció en redes sociales para hablar del hombre que marcó su vida dentro y fuera de la pantalla: Chespirito.
La publicación de Meza surgió a propósito del final de la serie documental Chespirito: Sin querer queriendo, transmitida hasta el 21 de agosto de 2025. En su cuenta de Instagram, Florinda compartió una reflexión que no tardó en viralizarse.
“La historia es la que es. Roberto y yo nos amamos por casi 40 años. Se dice fácil, pero fue una vida entera entregada al arte y al amor”, escribió.
El mensaje estuvo acompañado por una serie de imágenes que capturan diferentes momentos junto a Gómez Bolaños: detrás de cámaras, en sets televisivos, y en escenas más íntimas de su vida en pareja. Como banda sonora del tributo, eligió “Die with a smile”, una balada reciente de Lady Gaga y Bruno Mars, que potencia el tono melancólico del homenaje.
Entre los comentarios, uno llamó especialmente la atención: una seguidora le preguntó si consideraba la posibilidad de volver a enamorarse.
Florinda respondió con una frase que despeja cualquier duda: “Nunca podría, un Roberto Gómez Bolaños sólo se encuentra una vez en la vida”. Con ello, dejó claro que el vínculo con el comediante sigue intacto en su memoria.
Más allá de lo sentimental, Meza aprovechó el espacio para recordar el legado artístico de Gómez Bolaños, cuya obra sigue vigente a nivel internacional.
Su publicación se convirtió no solo en un recuerdo personal, sino en un acto de gratitud hacia los millones de seguidores que crecieron con sus personajes.
Florinda Meza, una figura que supo brillar con luz propia dentro del universo de Chespirito, reafirma que hay historias que no terminan con un adiós, sino que permanecen vivas en la memoria colectiva… y en el corazón de quienes las vivieron de cerca.