
El secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, visitó China, lo que marca la primera vez que un alto diplomático estadounidense lo hace en cinco años. La visita se produce en medio de una relación tensa entre EE. UU. y China, con pocas expectativas de resolver los diversos problemas entre los dos países. Esta es la primera vez que un funcionario estadounidense de alto rango visita China desde que el presidente Biden asumió el cargo en 2021.
El ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, se reunió con Blinken en la entrada de una villa en la Casa de Huéspedes Estatal Diaoyutai de Beijing, desviándose del tradicional saludo interior. Luego de un breve intercambio, sostuvieron una reunión que duró cinco horas y media. El enfoque del viaje de Blinken fue establecer canales de comunicación abiertos y estables para evitar posibles conflictos debido a la rivalidad estratégica.
También se espera que esta visita cree un camino para futuras reuniones entre EE. UU. y China, incluidas posibles visitas de otros funcionarios de EE. UU. y discusiones entre el presidente Xi y el presidente Biden en cumbres mundiales más adelante en el año.
La relación entre EE. UU. y China ha empeorado en una variedad de temas, como el comercio, la industria tecnológica y los derechos humanos. La visita de Blinken se considera significativa a nivel mundial, ya que las tensiones entre estas superpotencias podrían afectar al mundo, desde los mercados financieros hasta las cadenas de suministro globales.
Este artículo es fuente y está escrito por AI.