
Mark Zuckerberg, CEO de Meta, anunció que eliminará el programa de verificación de datos en redes sociales como Facebook, una medida que busca restaurar la libertad de expresión en sus plataformas.
En un video divulgado por el ejecutivo, Zuckerberg explicó que, aunque este programa fue creado con la intención de promover un espacio más libre para el intercambio de ideas, terminó teniendo el efecto contrario.
«Los verificadores de datos fueron demasiado parciales políticamente y han destruido más confianza de la que han creado», comentó.
Este programa, implementado en 2016, consistía en la colaboración con verificadores de hechos independientes que evaluaban la veracidad de las publicaciones en las plataformas de Meta. Su objetivo principal era reducir la propagación de desinformación y noticias falsas. Sin embargo, a lo largo de los años, fue objeto de críticas, especialmente por aquellos que lo percibían como una forma de censura y una amenaza a la libertad de expresión.
Zuckerberg reconoció que, con el tiempo, el sistema de verificación de datos fue responsable de «demasiados errores» y de un nivel excesivo de censura.
«Es hora de volver a nuestras raíces en torno a la libertad de expresión», señaló, destacando la importancia de devolver el control a los usuarios y reducir los errores cometidos en la moderación de contenidos.
Para reemplazar el sistema actual, Meta implementará una nueva función denominada «Community Notes», un enfoque similar al utilizado por X (anteriormente Twitter), que permite a los usuarios colaborar en la verificación de la información.
Este nuevo sistema será introducido progresivamente en Estados Unidos durante los próximos meses, con la intención de ir mejorando conforme avance el tiempo.
La medida de Zuckerberg llega en un contexto en el que las plataformas de redes sociales enfrentan crecientes presiones tanto de reguladores como de usuarios que buscan una mayor transparencia y un manejo más equitativo de la información.
Con esta iniciativa, Meta busca equilibrar la lucha contra la desinformación con la preservación de la libertad de expresión, una tarea cada vez más compleja en la era digital.