
Un proyectil ruso golpeó a una distancia de 150 metros del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y del primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, en el puerto de Odesa, resultando en cinco víctimas mortales.
El convoy experimentó la onda expansiva del ataque, y una gran columna de humo señaló el sitio del impacto. Ambos líderes afirman haber escuchado la explosión, lo que obligó al convoy a modificar su ruta.
Dmitri Pletenchuk, el portavoz de las Fuerzas Navales de Ucrania, informó que el proyectil resultó en cinco víctimas mortales y cinco heridos. A pesar del ataque, Mitsotakis y Zelenski llevaron a cabo la reunión programada minutos después.
“Este nivel de brutalidad, del que son víctimas ciudadanos pacíficos, causa gran tristeza e indignación. Cuando viajé por Odesa, me quedé asombrado porque, por un lado, está la imagen terrible de la destrucción causada por Rusia y, por otro, están la indomabilidad y el coraje del pueblo ucraniano”, destacó Mitsotakis.
Durante las últimas semanas, Odesa ha experimentado un aumento en la intensidad de los ataques, y en la noche anterior se observó la presencia de más de 20 drones sobrevolando la ciudad.
Ayer, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hizo un llamado urgente para brindar asistencia humanitaria a la Franja de Gaza con el objetivo de salvar a los niños que están padeciendo hambre. Este llamado se produjo después de la visita a dos hospitales, siendo la primera vez desde el inicio de la guerra en octubre.