Wendy Guevara, la carismática influencer y ganadora de La Casa de los Famosos México, volvió a ser tendencia en redes sociales, pero esta vez no por alguna ocurrencia o anécdota divertida, sino por un silencio que no pasó desapercibido entre sus seguidores.
Durante una transmisión en vivo en su cuenta de TikTok, Wendy fue cuestionada por varios fans sobre su opinión respecto al reality show La Granja VIP, el nuevo programa de TV Azteca que ha generado gran expectativa. Lejos de entrar en detalles o soltar alguna indirecta —como muchos esperaban—, la influencer optó por una respuesta directa pero neutral:
“No opino porque no lo vi. Si te gusta más, pues vela, mi amor. Está padre, cada quien puede ver lo que quiera.”
La frase, que en otro contexto podría parecer inofensiva, provocó una ola de reacciones divididas. Mientras algunos aplaudieron su diplomacia, otros la acusaron de “evadir el tema” por miedo a comprometer su relación con Televisa, empresa con la que actualmente tiene un contrato de exclusividad.
Y es que no se puede ignorar que Wendy debe gran parte de su popularidad a La Casa de los Famosos México, reality que le abrió las puertas del mainstream televisivo. Por eso, para muchos internautas, su negativa a opinar sobre el programa de la competencia fue vista como una forma de “cuidar intereses”.
Durante la misma transmisión, Wendy reafirmó su lealtad al proyecto que la lanzó a la fama:
“No opino porque no lo vi. Si te gusta más, pues vela, mi amor. Está padre, cada quien puede ver lo que quiera.”
Pero, como ya es costumbre en el mundo digital, la calma duró poco. Las críticas no tardaron en llegar. En Twitter y TikTok, usuarios la llamaron “vendida”, “doble cara” y hasta insinuaron que ha perdido la esencia que la hizo auténtica.
A pesar de los señalamientos, también hubo quienes salieron a defenderla, recordando que nadie está obligado a opinar sobre todo, y que su decisión de mantenerse al margen no la hace menos genuina.
Lo cierto es que, diga o no diga algo, Wendy Guevara sigue siendo una figura que mueve conversación… y polémica.
