
La Casa Blanca no pasó por alto el Día de San Valentín, pero su participación en la celebración de esta fecha fue todo menos convencional. En lugar de un mensaje de amor y unidad, la administración de Donald Trump optó por enviar un aviso polémico a través de sus redes sociales, dirigido a los migrantes indocumentados.
El mensaje, que rápidamente causó controversia, fue publicado junto a una imagen decorada con tonos rosas y corazones, en la que se destacaban los rostros del presidente Donald Trump y su asesor especial en política migratoria, Tom Homan. En el texto, con un tono que imitaba una rima clásica del Día de San Valentín, se leía:
“Las rosas son rojas; las violetas son azules. Si entras ilegalmente, te deportaremos”.

Este mensaje inmediato y directo generó reacciones mixtas, entre quienes lo consideraron una advertencia necesaria frente a la inmigración ilegal y quienes lo vieron como una forma insensible de abordar una cuestión tan compleja como la migración.
El tono del mensaje, lejos de ser una expresión tradicional del Día de San Valentín, fue percibido por muchos como una amenaza a aquellos que se encuentran en situación irregular en Estados Unidos.
Las políticas migratorias del gobierno de Trump han sido un tema recurrente de debate y polarización a lo largo de su mandato. Este tipo de mensajes refuerzan la postura del presidente respecto al endurecimiento de las medidas migratorias y su firme intención de reducir la inmigración ilegal al país.
La Casa Blanca no ha emitido comentarios adicionales sobre el impacto o la intención de este mensaje, que sigue sumando opiniones a favor y en contra de la forma en que se maneja la cuestión migratoria en Estados Unidos. Sin duda, la celebración del Día de San Valentín en la Casa Blanca no pasó desapercibida, pero también dejó claro el enfoque de la administración sobre este tema clave.