
Su forma directa, su humor espontáneo, su cercanía con el pueblo —todo eso forjó una figura que va más allá del periodismo
Hoy, miércoles 3 de septiembre de 2025, marca un momento histórico para el periodismo regiomontano. María Julia Lafuente, más conocida como “la Licenciada”, se despide del Telediario Medio dia de Multimedios, cerrando así una etapa emblemática en su carrera que comenzó en 1977.
La “Licenciada”, como la nombran con cariño en los hogares del norte del país, no solo leyó noticias: las vivió, las explicó y las convirtió en parte del día a día de su audiencia.
Quiero compartibles y comunicarles que he decidido tomarme un descanso, ponerme en pausa por tiempo indefinido, muchos se van a sorprender, otros especularan, pero la verdad es una sola, yo dejo las puertas de par en par… comentó María Julia
Su forma directa, su humor espontáneo, su cercanía con el pueblo —todo eso forjó una figura que va más allá del periodismo: una compañera de todas las tardes
María Julia comenzó su historia en los medios en 1977, cuando la televisión local aún se hacía casi con las manos. Desde entonces, fue testigo y narradora de los momentos más importantes del noreste mexicano. Desde coberturas en desastres naturales, campañas sociales, hasta entrevistas inolvidables, su sello fue siempre el mismo: claridad, empatía y firmeza.

Durante casi cinco décadas, condujo espacios como “Enlace 99”, “Diario del Aire”, “La Noticia en Concreto” y, por supuesto, el Telediario, donde su rostro se volvió sinónimo de información confiable y trato humano.
Aunque ya en 2024 había anunciado su salida del noticiero del mediodía, muchos pensaban que aún quedaban años por delante. Pero esta vez es definitivo: la periodista se jubila del aire. No por falta de pasión, sino por respeto al tiempo y al ciclo natural de la vida.

A lo largo de su trayectoria, María Julia ha sido reconocida por su profesionalismo, pero también por su labor humana. En 2008 recibió la Presea al Mérito Cívico del Estado de Nuevo León, y en 2025 el Congreso local le rindió homenaje por su impacto social como comunicadora.
Más allá de premios, su verdadero legado vive en las calles, en los mercados, en los taxis, en las familias que crecieron viéndola en televisión. Porque donde hay una historia que contar con honestidad y calidez, ahí estuvo ella.