
Cruz Martínez, productor musical y esposo de Alicia Villarreal, rompió el silencio tras las duras acusaciones de intento de feminicidio que la cantante le lanzó.
Según Villarreal, él la agredió brutalmente, lo que se reflejó en unas imágenes que circularon por redes sociales donde se mostraban los supuestos golpes en uno de sus brazos.
Un video también salió a la luz, mostrando a los maquillistas de la cantante tratando de ocultar sus lesiones minutos antes de salir al escenario, donde, de forma muy preocupante, hizo una señal de auxilio.
En su defensa, Cruz Martínez no tardó en desmentir todo. Al ser abordado por la prensa en Monterrey, el productor se mostró firme, asegurando que todo es “una mentira” y que pronto todo se aclarará:
“Yo estoy bien… Todo es mentira, todo es mentira”, dijo, negando las acusaciones rotundamente.
Pero atención, porque el escándalo podría tener un giro aún más impactante. Según el programa De Primera Mano, el verdadero motivo detrás de la pelea entre Cruz y Alicia no tiene nada que ver con las redes sociales, como se había comentado al principio.
La conductora Addis Tuñón reveló que la discusión surgió por un tema mucho más delicado: Alicia Villarreal habría contratado a una persona en su equipo de trabajo que, según su hija Melenie Carmona, habría cometido un abuso en el pasado.
Según Tuñón, los vecinos hasta escucharon la pelea esa noche. Y parece que no fue por Arturo Carmona ni por otro tercero, sino por esta situación tan personal entre madre e hija.